La Justicia condenó a una madre de 45 años debido a que su hijo, de tan solo 13 años, estaba involucrado en actos de robo y utilizaba un arma para cometer dichos delitos.
La fiscalía argumentó que era improbable que la madre no supiera de la existencia del arma, ya que todos los miembros de la familia compartían el mismo dormitorio.
Hace unos días, un hombre denunció en la seccional 18 de Ciudad de la Costa que fue víctima de una rapiña. Según su testimonio, mientras conducía su motocicleta por la zona de Colinas de Solymar, fue interceptado por delincuentes armados que le robaron el vehículo.
Tras una investigación, la policía llegó al barrio Nueva Esperanza, donde residía uno de los delincuentes, un niño de 13 años. Durante el allanamiento de su vivienda, se encontró un arma de fuego y se detuvo a la madre del joven.
Este sábado, la mujer fue imputada por no cumplir con los deberes inherentes a la patria potestad, ya que el fiscal Fernando Valerio consideró que era evidente que estaba al tanto de las actividades ilegales de su hijo. Este menor llegaba a casa con objetos robados y guardaba el arma utilizada para cometer los delitos debajo de su almohada, siendo precisamente allí donde la policía la encontró.
Como consecuencia de su condena, la mujer recibió una sentencia de seis meses de prisión en régimen de libertad a prueba. Por su parte, el menor fue imputado e internado en el Inisa por 150 días como medida cautelar, mientras espera la condena por el delito de rapiña.
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