¡Emoción y alegría en Tacuarembó! Una familia de esta pintoresca localidad logró hacer realidad un sueño al ganar un espectacular Renault Kwid 0 Kilómetros en la icónica promoción MITI MITI de Portezuelo.
Originaria de Tacuarembó, esta familia demostró que la perseverancia y la fe en la suerte pueden dar frutos inesperados. El premio, un flamante Renault Kwid, ha sido uno de los más codiciados desde que se lanzó la promoción MITI MITI, que ha mantenido a los uruguayos emocionados durante tres décadas.
La agraciada ganadora, Anacarolina Silva Lemes, no pudo contener su emoción al anunciar el increíble logro en su perfil de Facebook. La red social se llenó de mensajes de felicitación y admiración por este impresionante premio, que seguramente transformará la vida de esta familia en Tacuarembó.
El origen de esta inolvidable promoción se remonta a 1993, cuando la empresa familiar Portezuelo, reconocida por sus deliciosos alfajores y dulces, ideó por primera vez la emocionante dinámica de MITI MITI. La idea detrás de esta iniciativa era simple pero poderosa: encontrar la otra mitad para completar la satisfacción de sus clientes. A lo largo de los años, MITI MITI se ha convertido en un pilar de la cultura uruguaya, reuniendo a varias generaciones en la búsqueda de premios y experiencias sorprendentes.
La historia de Portezuelo, la marca detrás de esta querida promoción, es igualmente fascinante. Los hermanos Manuel y Eva Rosende dieron vida a este emprendimiento en la década de los setenta, elaborando deliciosos alfajores y masas en la panadería familiar en el barrio La Unión. Hoy en día, Portezuelo emplea a más de 450 personas y opera desde una impresionante planta de nueve hectáreas en Bella Italia. Además de los icónicos alfajores, la marca produce una amplia gama de productos que incluyen galletitas, obleas, pan dulce y budines, endulzando los momentos de muchas familias uruguayas.
La promoción Miti-Miti de Portezuelo ha demostrado ser un clásico en la cultura uruguaya, uniendo a personas de todas las edades en la emoción de ganar premios y en la celebración de una tradición que ha perdurado a lo largo del tiempo. Con tres décadas de historia, esta promoción continúa siendo un símbolo de gratitud hacia los clientes y de la dedicación de Portezuelo para hacer felices a las familias uruguayas.
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