Una familia en el Cerro ha presentado una denuncia penal contra una maestra de la escuela número 356, luego de que su hijo de seis años, alumno de primer año, relató un incidente ocurrido el pasado 21 de marzo.
Según la madre del niño, también educadora, su hijo regresó a casa con los puños de su uniforme empapados en agua, explicando que su maestra lo había mojado.
Según el relato, el niño se había pintado la cara durante el recreo y, como consecuencia, la maestra decidió, frente a sus compañeros, lavarle la cara en una pileta ubicada dentro del aula para higienizarse las manos.
El pequeño afirmó que la maestra le sumergió la cabeza en la pileta, lo que provocó que él resistiera utilizando sus brazos, resultando en que sus puños terminaran mojados.
La madre acudió al centro educativo al día siguiente para abordar el incidente con la directora, solicitando además un cambio de turno para su hijo. Sin embargo, se encontró con que la maestra, quien ocupaba el cargo de subdirectora durante la mañana, era la responsable del grupo de su hijo por las tardes.
Preocupada por el cambio en el comportamiento de su hijo, la madre comenzó a notar que el niño tenía dificultades para dormir, problemas de enuresis y mostraba menos energía. Estos cambios, junto con la persistencia del relato del niño sobre lo sucedido, llevaron a la familia a presentar la denuncia penal el sábado pasado.
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